La Fundación Heightened Hearts (HH), creada por Lyubov Smirnova, nació hace muchos años y fue guardada por ella en su memoria para usarla más tarde. Ese momento ha llegado y Lyubov se ha propuesto crear HH, una organización sin fines de lucro para aumentar la conciencia y empezar a abordar las muchas dolencias que afectan a la población mundial. Las áreas de enfoque para HH incluyen Nutrición, Vivienda, Apoyo Comunitario, habilidades sociales e interacción, educación y crecimiento espiritual. HH nunca será confesional o estará cerrada a cualquier ser humano por causa de su raza, tradiciones, o ubicación geográfica.
Lyubov se crió en un hogar tradicional con su padre y su madre durante sus primeros años. Después de la pérdida de su padre mientras todavía era muy joven, su madre asumió el 100 por ciento de la responsabilidad de administrar una casa, criar 7 hijos y proveer para todos. Fue durante estos años de formación que Lyubov desarrolló su amor por servir a los demás y la idea de hacerlo en una escala mucho más grande fue conceptualizada por primera vez.
La mamá de Lyubov es el tipo de persona que se quitaría la camisa de su espalda para dársela a alguien en necesidad, literalmente. Si se llegaba a dar cuenta de que alguien mostraba algún signo de escalofríos o temblores, ella dejaba lo que estaba haciendo y le ofrecía la ropa que llevaba puesta con el fin de ayudarlo. Ella nunca aceptaba que un niño pasara hambre y cuidaba de muchos. Ella es el tipo de mujer que le daría su última ración de comida a un niño hambriento, aunque se quedara sin nada ella misma. Sin darse cuenta, Lyubov estaba aprendiendo acerca de la bondad y el amor incondicional. Estos instintos de generosidad y entrega de su tiempo llegaron a ser tan naturales, que cuando ella se convirtió en una mujer joven con una gran carrera por delante, llegó a rechazar oportunidades de trabajo en favor de estar disponible para ayudar cuando la necesitaran. Lyubov está convencida de que dar nunca es una carga, sino un don y una bendición dados por Dios. Ella nunca ha dejado de dar a los demás y es hasta hoy, una empresaria muy respetada, conocida por siempre poner primero las necesidades de los demás, antes que las suyas. No encontrarás a una persona más agradecida por las bendiciones que recibe diariamente.
Durante años, Lyubov participó como colaboradora principal o como miembro de varias juntas de administración en organizaciones benéficas en los Estados Unidos y alrededor del mundo. Ella se sintió de lo más natural en esas zonas y se convirtió rápidamente en la encargada de varios proyectos debido a la claridad con la que emanaba bondad pura. Era obvio para todos los que fueron testigos que su amor por los demás, independientemente de haberlos conocido con anterioridad o no, era inigualable. Ella fue aún más lejos en varios casos. Proporcionó personalmente los fondos para pacientes que necesitaban tratamientos cardíacos, corrección de la visión y cirugías de tumores. Ella sigue patrocinando a muchas familias e individuos mediante el pago de sus programas de rehabilitación de drogas y alcohol. Se encontró a si misma pagando la escuela y ropa de los niños de su comunidad.
En el verano de 2008, mientras trabajaba para la Fundación Víctimas del Cáncer en el Reino Unido, Lyubov estaba siendo entrevistada para la revista People cuando dijo: “Un día me gustaría construir una iglesia en el pueblo natal de mi madre para ayudar a todas las personas que ahora están dispersas y separadas, a reunirse nuevamente. Siento que esta vida es demasiado corta y si cada uno de nosotros hace algo bueno por otra persona, particularmente algo por aquellos a los que no conocemos, el Mundo realmente podría llegar a ser un lugar maravillosamente diferente.”
Durante una visita reciente a su familia que aún vive en Ucrania, su madre se sentó con sus hermanos presentes y anunció que quería darle 2. 83 hectáreas de terreno, con una pequeña consideración. Ella tendría que construir su primer Orfanato o Retiro Espiritual allí. Lyubov estuvo de acuerdo y su madre donó 2. 83 hectáreas de tierra. Para no ser eclipsados, sus hermanos se comprometieron de inmediato a donar alimentos de la granja familiar y suministrarían a las primeras instalaciones de la fundación, todos los años, mientras hubiera necesidad. Lyubov podría dejar de soñar y empezar a trabajar. En ese momento, el tiempo se detuvo y Lyubov se dio cuenta de que su sueño de toda la vida, se haría realidad.
Lyubov es esa persona que siempre retribuirá sus dones y bendiciones a alguien más. Heightened Hearts es el siguiente paso natural en su vida, que les permitirá a ella y a sus colegas continuar por un camino de servicio.
La primera fase de HH es la construcción de un lugar de reunión para cualquier persona a la que le gustaría investigar su propia espiritualidad sin ningún tipo de presiones de líderes religiosos, etc. Ningún miembro de cualquier clero, secta, iglesia, mezquita o sinagoga presidirá jamás el Centro HH para el avance del crecimiento espiritual individual. Todos aquellos que deseen crecer en esta área son bienvenidos.
Mientras creaba su fundación, se le preguntó a Lyubov cuándo fue que comprendió que su propósito de estar aquí se había manifestado. Ella dijo en la voz más delicada, “Realmente no sé cuándo o dónde empezó mi amor a Dios. Sólo sé que su espíritu vive en mí. Cuando no estoy siendo útil para los demás, siento un vacío que es indescriptible. Ciertamente no es una manera en la que cualquier persona que se preocupa o siente querría vivir. Cuando estoy ayudando a otros, independientemente de las circunstancias, sé por qué estoy allí. ”
Lyubov no puede ser nada más que generosa y consciente de aquellos que son menos afortunados. Ella planea pasar la mayor parte de su vida en el desarrollo e implementación de su Fundación Heightened Hearts.